Ejercicios para hacer en casa o en la oficina

Ejercicios para hacer en casa o en la oficina

El ritmo vertiginoso de la ciudad deja poco tiempo libre… y el ejercicio es una de las actividades que primero tachamos de la lista cuando las horas no sobran. En esta nota, te enseñamos algunos tips para que la oficina no sea excusa a la hora de sentirte bien.

 

La vida urbana te enfrenta a un constante dilema: las obligaciones demandan cada vez más tiempo, pero entre ellas tenés que contemplar el “sentirte bien”. El estar activa, a gusto con vos misma, mantener tu silueta pero sobre todo, cuidar tu cuerpo a nivel orgánico es un must para la mujer moderna. La pregunta es ¿En qué momento?

Si trabajás al menos 8 horas por día frente a una computadora y creés que incorporar hábitos sanos entre medio es un imposible… ¡Error!

Hay muchas formas de cuidarte, empezando por una alimentación saludable y siguiendo con estos ejercicios súper fáciles que te vamos a enseñar para hacer en tu casa, en la oficina, donde quieras… lo importante es ponerse en movimiento. Empezando ¡Ya!

Frente a la compu

¡Glúteos bien firmes!

¿Creías que las sentadillas o los aparatos eran la única solución para los glúteos? Ahora podés implementar un ejercicio que no necesita tanto despliegue, y te ayudará a alcanzar óptimos resultados. Sentada en tu silla, contraé bien los glúteos y relajá; hacé 3 series de 20 repeticiones a la mañana, 3 al mediodía y 3 a la tarde.

Abdominales sin esfuerzo

Si te preocupa tu abdomen, ¡Ocupate ya mismo! La mejor forma de tonificarlo es manteniendo la postura; si te sentás encorvada, vas a ayudar a criar esa pancita que tanto te molesta. Entonces, a cada rato recordá: espalda en linea con el respaldo, hombros erguidos, abdomen contraído.

Relax de hombros

En posición bien erguida, levantá los hombros como si quisieras tocar con ellos tus orejas. Mantené ambos elevados durante unos segundos y relajá. Repetilo varias veces, notarás un efecto súper descontracturante.

Cuando nadie te ve

No hay nada de malo en tomarte pequeños recreos para ejercitarte, pero probablemente no te sientas cómoda si tu jefe te sorprende en medio de unas flexiones. Por eso, aquí van algunas sugerencias para cuando estés en la ofi pero a solas:

• Ponete de pie y, sosteniéndote apenas del respaldo de tu silla, elevá tus talones hasta que quedes parada sobre ambas puntas de pie. Tratá de mantenerte dos segundos, bajá y luego repetí, tantas veces como te sea posible. Este ejercicio no sólo tonifica tus piernas sino que también mejora tu circulación. Eso sí, no olvides elongar tus gemelos.

• Colocate de espaldas a la pared apoyando tu peso sobre ella, luego flexioná las piernas hasta quedar a 90º con el piso. Resistí en esta posición tanto como te sea posible, y volvé a ponerte de pie. Repetí de 5 a 10 veces.

• Parate bien derecha hacia el frente. Flexioná ambas rodillas al mismo tiempo, hasta que no veas más los dedos de los pies. Mantenete en esa posición y volvé a pararte, estirando. Hacé 3 series de 20 repeticiones.

Por último

Saber elegir

Si trabajás en un décimo piso tal vez se te haga difícil… pero si tu oficina está entre el 1 y el 3, ¡No hay excusas! Elegí usar tus pies en lugar del ascensor.

Puede parecer algo cansador, pero realmente cuando te acostumbres ni lo notarás. Es más, podés ir sumando un piso cada vez que sientas que tu cuerpo se acostumbró. De ahora en más, ¡Basta de esperar ascensores que tardan en llegar!

Caminatas breves

Por más que trabajes sentada la mayor parte del día, trata de pararte cada no más de 2 horas, así ayudas a activar la circulación y evitas la formación de várices por permanecer mucho tiempo en la misma posición. Buscá alguna excusa para salir a dar una vuelta pero ¡Ojo! Nada de atacar el quiosco.

Esperamos que estos consejitos ayuden a tu bienestar y activen tus ganas de volver a hacer ejercicio.

La actividad física es una de las claves fundamentales para mejorar tu calidad de vida.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *