Realidades, sexualidad y adolescencia

Realidades, sexualidad y adolescencia

Las estadísticas mundiales y nacionales son absolutas: los adolescentes varones y mujeres inician su vida sexual activa alrededor de sus 15 años.

 

Probablemente más de una madre y un padre dirán «¿Mi hija/o? ¡Todavía es chiquito/a!». Y es probable que lo sea para encarar con responsabilidad la expresión de su sexualidad. Pero, más allá de lo ideal, algunas realidades son categóricas.

En Argentina, los debates por la sanción de la Ley Nacional de Salud sexual y reproductiva, así como la correspondiente a la ciudad de Bs. As, marcaron tendencias claras sobre la aceptación y la negación de la actividad sexual de los adolescentes.

Las diferencias de maduración entre la edad biológica y la edad emocional ocasionan que el deseo sexual no sea acompañado por la posibilidad de reflexión y toma de conciencia de los riesgos existentes ante la expresión activa de la sexualidad.

Los adolescentes se exponen a enfermedades transmisibles sexualmente y a embarazos no deseados.

El terror de estos tiempos es el SIDA, porque lleva a la muerte. También los embarazos no planificados (en cualquier etapa de la vida, pero fundamentalmente en la adolescencia) pueden llevar a la muerte; a otro tipo de muertes, concretas o sutiles: abortos y sus consecuencias físicas y emocionales, pérdida de proyectos de vida, abandonos, maltratos, desequilibrios, sufrimientos y dolores profundos.

Algunos temas conversar para con ellos y reflexionar juntos:

•  Qué necesitamos y cómo funcionamos sexualmente los varones y las mujeres.

• Qué condiciones particulares son las recomendables para iniciarse sexualmente de modo saludable.

• Saber discriminar entre el consumismo sexual y el erotismo y la intimidad humanizados.

• La importancia de la relación entre los afectos y la sexualidad.

• Reconocer el propio sistema de valores sexuales.

• Conocer qué conductas facilitan el embarazo.

• Cuáles son y cómo se manifiestan las enfermedades transmisibles sexualmente.

• Cuáles son los métodos preventivos de enfermedades.

• Cuáles son los métodos anticonceptivos, su eficacia y aplicabilidad según los casos particulares y su influencia en la sexualidad.

• Qué efectos producen el uso y abuso de drogas y alcohol.

A lo largo de estos artículos iremos encarando estos y otros temas relacionados con la sexualidad, porque no sólo los adolescentes necesitan educarse sexualmente desde una educación para la vida. Los adultos también necesitamos ayuda y orientación, por nuestros hijos, por nuestra pareja, por nosotros mismos.

Autor: Lic. Virginia Martínez Verdier
www.sexuar.com.ar

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *